VISITAS PEDAGOGICAS
La Escuela de Artes y Oficios de Sestao

Don José Roda, Director de la Escuela

UN PLANTEL DE OBREROS HABILES

Invitación aceptada.

Ambulando días pasados , en cumplimiento de nuestra misión, por la dilatada calle de Chávarri, del concejo de Sestao, esa calle populosa que parece trasunto fiel de una vía de ciudad industrial británica, con su linea , a un lado, de altos y renegridos edificios, verdaderas colmenas humanas, y con la vista , al otro, de las innumerables chimeneas de nuestro primer establecimiento siderúrgico, nos dimos de manos a boca con Don Vicente Díez, infatigable trabajador manual, capacitado por su clara inteligencia y su certera visión de los problemas sociales, para las más elevadas empresas, y que ahora, por la voluntad de sus convecinos, desempeña el cargo de Alcalde, en el que va dejando, un día tras otro, señales ciertas por las cuales su nombre habrá de verse venerado en un no lejano porvenir.

Con la sobria franqueza habitual en él , reveladora de un animo claro, exento de toda sombra de doblez, Don Vicente nos invitó a que le acompañáramos a uno de los contados edificios de la acera que cae sobre los terrenos de " la fabrica".

- Aquí está- aclaró - la Escuela de Artes y Oficios de Sestao, de la que por mi cargo de Alcalde, soy presidente nato y ahora están expuestas las labores de los alumnas y alumnos que asistieron al curso último; vamos a echarles un vistazo antes de que los retiren, que en virtud de lo acordado, ha de ser hoy mismo y dentro de unos minutos. Aprovechemos, pues, los pocos que nos quedan.
Yo tenía noticia de que en aquel edificio , propiedad de la Cooperativa de Obreros y Empleados de Altos Hornos de Sestao, estaba instalada la Escuela de Artes y Of¡cios, en local cedido generosamente por la entidad citada; pero, siempre de paso rápido por el concejo, nunca se nos había ocurrido rendirle una visita.

Decidimos, pues , aceptar la invitación a la que, por otra parte hubiera sido poco cortés sustraernos, y en la amable y autorizada compañía del alcalde, nos dirigimos a visitar la escuela.
Nuestra llegada puso en encantadora dispersión a un grupo de alumnas , todo alegría y vivacidad como gorjeo de pájaros, que ocupaba la escalera de alto a bajo, esperando la hora, ya próxima a llegar, de recoger las labores que desde tres días antes tenia cada cual en la sala-exposición.
Reaccionaron las nenas al darse cuenta de quien llegaba- aludimos, claro está , al alcalde- y todas muy modositas y muy serias, anticipando su papel de amas de casa, saludaron con respeto, abriendo paso y dejando libre la parte central de la escalera.

En vista de lo expuesto..

Nos recibió a la entrada el Director de la Escuela, un tan culto caballero como Don José Roda, dignísimo continuador de la obra de aquel don Nicolás Esparza, de muy grata memoria en Sestao, donde ha sido perpetuada en un busto bastante inferior a sus merecimientos y no ciertamente por culpa del artista que lo esculpió, sino por la exigüidad de la suma al caso dedicada.

Disgresiones aparte, el señor Roda, con exquisita cortesía, seguido además de los profesores que con él comparten las tareas de la casa, fue mostrándonos lo expuesto. Largas mesas del salón central aparecían cubiertas por las labores de costura, bordado y plancha, realizadas todas ellas por niñas de pocos años, que ya parecían, sin embargo, salidas de un taller de confecciones en el que trabajaran obreras hábiles, capaces ya de obtener el dictado de maestras.
Pero no se crea que esta exposición infantil de labores se parece en nada a otras exposiciones que con mucha frecuencia se ven por ahí en colegios de niñas y otras escuelas similares de Sestao, pero no de la importancia de ésta. Lo general es que las niñas presenten ropitas para su uso, o pañales bordados y piececitas con muchos adornos en cintitas , encajes, calados, etc..

No es eso lo que se pudo ver en estos días, y vió, sin duda , todo el pueblo de Sestao. Camisas de hombre, en tonos oscuros, propias para el trabajo, mudas interiores de hombre y mujer de confección solida y listas para el uso inmediato; prendas prácticas, perfectamente acabadas que han de suponer el ahorro de un gasto para las confeccionadoras. Pruebas ciertas de que se trata de un pueblo eminentemente trabajador , no dado a lujos vistosos y muchas veces prácticamente inútiles, sino a lo que puede constituir y constituye siempre de hecho una ayuda necesaria en el hogar humilde de un obrero, donde no se cuenta con más ingresos que el proveniente de un jornal honrado.

Vistas con detenimiento gran parte de las practicas labores del salón central, nos adentramos en otra sala en la que pudimos contemplar, realmente maravillados, los notabilísimos trabajos de dibujo y mecánica aplicada presentados por muchos alumnos no menos aplicados, y perdonad el juego de palabras.

Allí máquinas de muy diversas especias, en miniatura claro está, construidas y acabadas en acero de fabrica, con sus planos al frente , completamente detallados; allí figuras modeladas en yeso, escayola y hasta en mármol y en bronce; allí cuadros al oleo, al lápiz y a la acuarela originales y copias de obras maestras; allí cuadernos de contabilidad con todas las modalidades de libros de comercio y empresas industriales; allí modelos de cartón con toda clase imaginable de detalles; allí, en fin, pruebas palpables de que en la Escuela de Artes y Oficios de Sestao se trabaja a conciencia y se enseña con todo esmero, pese a las dificultades inherentes a la evidente falta de amplitud en los locales dedicados a a tan elevado fin.

Fuimos de asombro en asombro cuando se nos dijo que aquellas piezas perfectas y listas para funcionar habían salido de manos de niños de trece a quince años, muchos de ellos aprendices de la fabrica, que aprovechaban las enseñanzas teóricas de la escuela para construir en el taller de la industria, ya que en la escuela no tienen siquiera los materiales que parecen salidos del proyecto de un ilustrado ingeniero.

Rudimentos en Historia

Terminada la visita a las salas, previa orden al efecto, entraban las niñas en alegres bandadas para recoger los efectos que, desde aquel momento, dejaban de ser objetos registrados bajo una cartulina con un número y un nombre, para convertirse en prendas de inmediato uso para los padres y hermanos de las interesadas o para ellas mismas, nos reunimos en el saloncito que hace de Secretaría , y comenzó una amena charla en la que no faltaron las anécdotas y los recuerdos , predominando sobre todos ellos el que el director y los siete profesores de la escuela guardan a la memoria del nunca bastante bien llorado don Nicolás Esparza, alma y vida del establecimiento durante muchos años.

Treinta y seis han pasado ya desde la fundación de la Escuela . Desde un principio se tropezó con la dificultad de hallar un buen local; pero ello fue vencido en parte con el generoso proceder de la Cooperativa de Empleados y Obreros de Altos Hornos, que cedió para el caso el primer piso del magnifico edificio que erigió para sus usos en la acera derecha, mirando al ancho mar, de la arteria principal de este concejo.

Desde los primeros años comenzó esta escuela a alcanzar tal nombradía en la comarca, que no obstante existir establecimientos de igual naturaleza en los pueblos limítrofes, acudían aquí los muchachos de dichos pueblos casi en tan elevado número como el de alumnos nacidos en Sestao.
Y esto obedecía al prestigio del Director y profesores, a la protección que la vecina fabrica prestaba y sigue prestando , a la Escuela, y a otras causas entre las cuales no pesaba poco la condición especial del pueblo de Sestao, esencialmente trabajador y deseoso de continuar una tradición que le viene desde los remotos tiempos de las ferrerías vizcaínas, que esparció la fama por el mundo entero.

Así fué desarrollandose este centro productor de obreros especializados y hábiles hasta quedar , como ahora está, excesivamente corto para sus necesidades. Y así aumentó el prestigio año tras año, haciendo que la Escuela de Artes y Oficios de Sestao obtuviese las más altas recompensas a cuantos concursos asistió, tanto en Bilbao, como en otras grandes poblaciones.
Preside los destinos de esta Escuela, a la que solo faltan los amplios talleres que le son precisos para que pueda ser tildada de modelo, una Junta administrativa compuesta por el Alcalde de Sestao como Presidente,tres concejales del Ayuntamiento y seis vecinos de arraigo de la localidad.

Esta Junta ha venido renovándose sucesivamente, con acuerdo al reglamento por el que se rige, quedando constituida en la última renovación por los señores siguientes: presidente , don Vicente Díez, alcalde de Sestao , y vocales los concejales señores Marcaida, Peña y Arrate y los vecinos don Agustín As... ,don Paulino Eguia, don Victor Hurtado, don Alejo Iturri, don Felix Senagoechea y don Lucas Aréjula, actuando como secretario don Mario Clérigo , a la vez profesor de la Escuela.
El profesorado está formado por el Director, don José Roda, que lleva más de 30 años en la escuela, y que estuvo siempre identificado con su predecesor en el cargo, el finado señor Esparza, y por los profesores don Santiago Gracia, don Manuel Andres,don Rafael Barco, don Alfredo Marin , don Alfredo Díaz, y don Carlos Esparza, hijo del inolvidable don Nicolás, más el profesorado femenino integrado por doña Emilia Clérigo y doña Emilia Tejada.

Las clases que sostiene esta escuela son las siguientes:
Estudios de Ampliación, mediante las cuales los jóvenes que han dejado atrás la edad escolar pueden prepararse debidamente para asistir a las demás clases.
Contabilidad o Teneduría de Libros para fines comerciales o industriales.
Dibujo Industrial y de Figura, en sus diversos grados.
Y corte, plancha y confección.

De la concurrencia de alumnos, es buena prueba la matricula obtenida en el curso 1930-31, que fué de 353 alumnos en la escuela de Obreros, 179 en la de la Mujer y 46 en la de Estudios de ampliación, o sea un total de 578 matriculados. Y para este año hay un ascenso considerable.
En cuanto a la eficiencia de la enseñanza, basta saber que al final del curso último se concedieron cuatro premios de Honor, veintidós primeros premios , veintiseis segundos y treinta y cinco terceros , más un elevado número de sobresalientes.

Proyectos para pronto

Pero como hemos dicho, los locales de la escuela se han quedado excesivamente cortos. Y faltan los talleres, los buenos talleres que sirvan de complemento a las clases teóricas y que acaben con la anomalía de que los aprendices de la fabrica realicen en ésta los trabajos que luego llevan a la escuela, cuando lo natural seria que realicen en la escuela los trabajos que pudieran servirles para ser admitidos en la fabrica como operarios dispuestos a ocupar el nivel correspondiente a quien aporta al trabajo conocimientos prácticos del oficio.

Esta necesidad se ha visto desde hace muchos años, y los ayuntamientos que han ido sucediéndose examinaron el problema y estudiaron soluciones, que por uno u otra causa no pudieron llevarse a la práctica.
Ahora parece que la cosa va de veras. El Ayuntamiento actual altamente encariñado con la idea, como corresponde a una corporación compuesta exclusivamente por obreros , padres y hermanos de obreros, ha empezado por adquirir los terrenos necesarios para la construcción de un edificio de nueva planta, en cuyos sótanos, que se construirán con toda la amplitud precisa , habrán de ser instalados los talleres, lo más completos posible, para lo cual se cuenta de antemano con la generosa ayuda , que no ha de faltar , de las poderosas factorías establecidas dentro del termino municipal.

La nueva Escuela que se construya será , seguramente, un centro modelo en su especialidad, del que han de salir los alumnos perfectamente capacitados y en condiciones de que sus servicios puedan ser aceptados por las fábricas desde el primer momento.
Los terrenos adquiridos - que no son exclusivamente para la Escuela , pues han de aprovecharse también para un grupo escolar de doce grados- están situados en un lugar centrico de la población, entre la calle de Chávarri y la parte alta, y se le dará acceso a la primera de dichas calles por medio de una transversal que saldrá , próximamente , enfrente del edificio en que ahora está la escuela.

Existe ya un proyecto completo, magníficamente trazado por el arquitecto municipal, don Santos Zunzunegui. El edificio, que tendrá dos pisos, estará dividido en tres cuerpos ,de forma rectangular, e irá rodeado por un amplio parque , que servirá de lugar de recreo a los alumnos de las escuelas primarias y la de Artes y Oficios. Esta ultima ocupará la mitad de las instalaciones y su presupuesto será de unas ochocientas mil pesetas, siendo de un millón la totalidad de la obra.
Claro está que el Ayuntamiento no puede acometer ésta con sus solos recursos, pero cuenta con el auxilio económico de la Cajas de Ahorros Vizcaína y Municipal de Bilbao, que le han ofrecido la mayor suma posible de facilidades.
En la primavera próxima darán comienzo las obras, que se llevarán con tal celeridad, que es muy probable que al año de comenzadas pueda estar la nueva Escuela de Artes y Oficios en pleno funcionamiento.
Con esto contará el pueblo de Sestao con un centro eficaz para la completa enseñanza del obrero, de tal modo que como hemos dicho, puedan los alumnos aprobados pasar a las fabricas a prestar sus servicios sin tener que sufrir las largas molestias del aprendizaje a jornales reducidos..
Gracias a todos
Pecaríamos de ingratos si cerráramos esta deshilvanada información sin rendir un público testimonio de gratitud a cuantas personas nos facilitaron los datos necesarios , y muy especialmente al dignísimo Alcalde-Presidente, don Vicente Diez, legitimo orgullo de la ilustrada clase obrera vizcaína , y al Director, don José Roda, feliz continuador de la obra de don Nicolás Esparza.

Roger de Juval
El Noticiero Bilbaíno.
Octubre de 1931